"Caminante no hay camino, se hace camino al andar..." EL FISCALISTA DEL AÑO ha caminado por el destino anhelado frente al difícil reto del 2009. La conquista de su triunfo es un estímulo pare seguir haciendo camino. Su testimonio es la realización que anhelamos, en este momento, para transfigurar la doliente sombra del México de los pobres, en el amanecer del Nuevo Mundo.

EL MAESTRO JOSÉ ANTONIO PÉREZ RAMOS nació en San Pedro Pochutla, Oaxaca, el 4 de diciembre de 1966. Sus padres eran de muy escasos recursos y cuando él era pequeño lo llevaron consigo y con sus hermanos a la Ciudad de México; pero sin encontrar las oportunidades que necesitaban, regresaron al pueblo.

"Respecto a mi infancia -confiesa el maestro- fue como la de muchos niños de mi tierra: te diviertes, juegas, pero también tienes que trabajar, porque hay que obtener recursos. Mi madre nos apoyó muchísimo y hasta se fue a Tijuana para que nosotros pudiéramos seguir nuestras carreras profesionales. Uno de mis hermanos también emigró a los Estados Unidos, pero retornó y ahora trabajamos en conjunto. En fin. Llevamos a cabo el estudio con un poquito de esfuerzo, pero con muchísimas ganas y el enorme deseo de ser los mejores profesionistas que se pudiera."

José Antonio Pérez Ramos cursó toda su educación en escuelas públicas de Oaxaca, hasta egresar de la Facultad de Contaduría, con la Generación 86-91. En la misma Universidad Benito Juárez prosiguió el postgrado de su especialidad; y a la par, estudió para obtener la Licenciatura en Derecho. Unos años después cursó la maestría y se recibió con mención honorífica.

Montó su primer despacho contable antes de obtener su primera licenciatura. Sus primeros clientes tenían problemas de contabilidad; pero, sobre todo, tenían problemas económicos y fiscales. Por ayudarlos, comenzó a prestar servicios de asesoría en Defensa Fiscal. Sin embargo, para resolver la problemática se requería título de abogado, y sus pobres clientes no podrían pagar el costoso servicio del profesional indicado. En consecuencia, el joven contador hizo el camino de su formación universitaria para obtener el título de Licenciado en Derecho y así, armado de conocimientos y de valor, defendió el patrimonio y el interés de sus clientes. Su propio triunfo lo ha impulsado para especializarse en el estudio de modo tal que sus múltiples títulos, diplomados y distinciones han pasado a segundo plano. Como verdadero profesional del Siglo XXI el Maestro es un investigador permanente y esencialmente autodidacta.

En la figura del C.P.C José Antonio Pérez Ramos, Director General del consorcio MRCI, se colman todas las exigencias de nuestro Consejo de Opinión para nominarlo como: “EL FISCALISTA DEL AÑO”.

Sus ambiciones intelectuales convergen en ideales comprometidos con la patria, la familia y la justicia. Simbiosis de cerebro y corazón que lo motiva para innovar a la Defensa Fiscal mexicana, en aras del Estado de Derecho.

En el ejercicio de su profesión, el prestigiado fiscalista propugna la protección y creación del empleo, tanto por el cumplimiento de sus propias responsabilidades, como por sus estudios analíticos, sus investigaciones y su afán de transmitir sus experiencias y conocimientos, mediante la publicación oportuna de artículos y de libros de consulta. En su decidida consagración a la contaduría pública y al Derecho Fiscal, no cesa de impulsar la conservación y desarrollo de las fuentes de trabajo, respondiendo a los intereses de toda la Nación, sobre los intereses de la burocracia imperante y más aún, sobre los de un individuo.

La actividad académica del licenciado Pérez Ramos es intensa, constante, generosa y como a pesar de sus títulos universitarios corresponde a una cotidiana e incesante actualización, asegura que su preparación es usualmente autodidacta. En relación a su educación profesional certificada, ha obtenido dos licenciaturas la de Contaduría Pública y la de Derecho, cursadas en la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca y en la Universidad Regional del Sureste; y entre sus estudios de postgrado sobre Derecho Fiscal realizó tanto la especialidad como la maestría, con mención honorífica.

Entre los libros más importantes de su autoría descuellan: “Defensa Fiscal para Contadores” “Constitucionalidad del Costo de lo Vendido con Defensa Fiscal”, “Lecciones de Defensa Fiscal para Principiantes”, “Diagnóstico Fiscal” y “Defensa Fiscal en General”.

Actualmente, incursiona en el Sistema para la Defensa Fiscal basado en la Ley Federal de los Derechos del Contribuyente, en sus palabras está la explicativa razón: “Si la autoridad se excede en el actuar, o sea, si va más allá de lo que la faculta la ley; a través de la misma ley podemos regular los mecanismos de defensa para que el contribuyente no pague tributos excesivos ni las multas o sanciones que no le correspondan.”

Con el prestigio conseguido por más de 15 años de triunfos en el terreno profesional el contador Pérez Ramos reconoce con humildad que su éxito se debe, tanto a la enseñanza de sus maestros y de sus colegas, como a las recomendaciones públicas de sus complacidos clientes: factores que para operar necesitan del ambiente de trabajo ético y honesto que impera en MRCI. Al respecto opina: “Protegemos el patrimonio del cliente que nos confía esa gran responsabilidad. De otra manera, no hubiésemos crecido como Firma”.

En su opinión, es necesario contar con la confianza de los clientes para introducir nuevas estrategias fiscales, a fin de convencerles para utilizar ideas tan audaces como el desarrollo de los activos intangibles. Sobre esto el director de MRCI considera:

“Ahora, el valor intangible está fiscalmente reconocido y sin duda, es parte importantísima de una empresa. Las marcas famosas tienen muchos bienes inmuebles y patrimoniales extremadamente valiosos; sin embargo, es posible que el precio de todos ellos sea superado por el valor intangible que tiene, por ejemplo, una firma o una marca de verdadero prestigio. Sin embargo, los empresarios mexicanos no están acostumbrados a registrar el valor intangible de su empresa.

Por ejemplo, se dan casos en que se cuenta con una magnífica ruta de distribución, un sistema de atención a clientes, un atractivo empaque y un reconocimiento de calidad superior al precio del producto o del servicio esencial; es decir, se tiene una serie de valores intangibles que deben reflejarse en los estados financieros para definir el valor real de la empresa. Así se incrementa el patrimonio, pues la ley reconoce el valor intangible como una inversión. En su artículo 38, la LISR dice que son gastos diferidos y su artículo 39 permite una deducción del 15% anual. Posiblemente, si la empresa que vale 10 millones en activos tangibles, pueda valer 100 millones, tomando en cuenta los intangibles.”

“Si el valor intangible es una inversión y si el IETU permite deducir las inversiones, hay que aprovecharlo. Es una desgracia que cuando la norma permite ciertos mecanismos de deducción, muchos empresarios cometan el error de caer en el delito de la defraudación fiscal, lo cual suele repercutir en el menoscabo del patrimonio y hasta en la privación de la libertad.”

Sobre el complicado tema del avalúo de los Intangibles, su principal impulsor nos dijo: “Los principios de contabilidad o normas de información financiera establecen los mecanismos para reconocer los activos intangibles. Hay una figura jurídica, designada como corredor público, reconocido por el reglamento mercantil en el Código de Comercio, como el sujeto idóneo para realizar los avalúos correspondientes. El valor de los intangibles se da precisamente por el desempeño y la calidad de la empresa, y en conformidad con los efectos inflacionarios”

Para promover los intangibles, nuestro Fiscalista del Año publica artículos dirigidos al empresario mexicano. Sus paradigmas demuestran el uso y el usufructo de los valores intangibles en el mundo; por ejemplo, hay empresas internacionales que, al solicitar algún crédito bancario, sólo necesitan su marca para garantizar el pago: "¿Acaso creen que a Coca-Cola no le otorgan préstamos, cuando pone su marca como garantía? Así, la empresa trasnacional no tiene que otorgar ni arriesgar activos fijos”.

Sobre los nuevos mecanismos de recaudación introducidos por la Secretaría de Hacienda a través del Congreso y de la Suprema Corta de Justicia, nuestro entrevistado opina: “El diálogo político es sano para las finanzas públicas; pero puede resultar lesivo cuando promueve la intención de recaudar transgrediendo el Derecho del contribuyente”.

“No se justifican los agravios que pueda cometer la autoridad, con la exclusiva finalidad de contar con más dinero para el gasto público. Además, y en cuanto al proceso administrativo, hay que buscar armonizar el efecto recaudatorio con la inversión”.

El Dr. José Antonio Pérez afirma que la forma idónea para recaudar en un país como México es a través de los impuestos indirectos. Observa que la afectación de un IVA homologado afectaría, principalmente a los contribuyentes que son capaces de soportar la carga; es decir a los consumidores que tienen dinero para gastar en lujos, diversiones y productos de mayor precio: “Incluso, si se generalizaran los impuestos indirectos, como el IVA, existen medidas administrativas para que la imposición del gravamen, se reglamente y aplique de manera tal, que beneficie a los más pobres”

El Dr. José Antonio critica severamente al IETU, impuesto que debe desaparecer porque su tasa mínima es carísima y su contabilidad es complicada, confusa y costosa: “Ocurre que con el IETU se pagan impuestos más elevados, se desanima la inversión y se destruye el interés de los empresarios para mejorar el nivel de vida de los trabajadores.

Como la base del IETU queda excesivamente gravada, lo importante no es corregir el impuesto en sí mismo. Deben corregirse las bases con las que se calcula.

Se argumenta que el IETU está enfocado a combatir la defraudación fiscal. En realidad, está enfocado a gravar el patrimonio de las empresas conforme convenga más para los intereses del fisco. Así, el mismo patrimonio podrá a gravarse como si fuera de una persona física, o de una persona moral.

El IETU no solamente es nocivo para las fuentes de trabajo; también es inconstitucional. ¿Acaso no se violan los principios constitucionales, cuando se a grava el patrimonio de los empresarios, indistintamente de las utilidades o las pérdidas que tengan durante el año?”.

En opinión del Dr. José Antonio Pérez, el Impuesto sobre Depósitos Bancarios no funciona realmente para combatir al comercio Informal: “El comercio informal no lo va a pagar, porque tiene muchos recovecos y mañas para evadirlo, esconder sus ingresos y seguir haciéndose el chiquito. El camino contra el comercio informal y contra la economía clandestina en general, está en los impuestos indirectos que todos los consumidores pagamos por igual y sin poderlos evadir.

Nadie repara el “Daño a la Nación”, cuando una importante fuente de producción desaparece y deja sin empleo a numerosos trabajadores. A la autoridad impositiva no le importaron las pérdidas del contribuyente ni su falta de dinero para los impuestos.

Como buenos mexicanos, debemos contribuir para que nuestro país subsista y se mejore; pero debernos oponernos a las tasas y los castigos injustos sobre las contribuyentes cautivos.

No porque el gobernado se atrevió a correr riesgos para establecer un negocio productivo, tiene que aportar sus bienes y hasta perder su patrimonio, por carecer de la seguridad jurídica y social que el Estado debiera proporcionarle.

El servicio tributario debe ser recíproco entre gobernantes y gobernados. No se vale que el gobierno pueda no cumplir, no servir y no considerar los intereses ni necesidades del contribuyente; mientras el gobernado tenga que aportar su inversión, trabajo y contribuciones al servicio del Estado.

Hasta en el caso del negocio clausurado o enajenado por el incumplimiento de sus obligaciones fiscales, ya tuvo que aportar los impuestos exigidos para su establecimiento, el gobierno puede, impunemente, originar pérdidas irreparables por falta de servicios urbanos, seguridad y orden social. Sin embargo, en lugar de asumir sus responsabilidades, castiga al empresario, sale con el IETU y le cobra, cuando debiera pagarle.

Si no hay justicia recíproca, equidad y proporcionalidad, el IETU es nocivo para las empresas, los trabajadores, la productividad y la competitividad de México.”

El Dr. Pérez clama por un Estado que luche por la Simetría Fiscal: "Teóricamente, se podrá lograr una adecuada simetría fiscal, logrando que todo el mundo contribuya dentro de un sistema tributario con bases justas. La justicia de la simetría fiscal implica que, de verdad, una de las partes acumule lo que otra deduzca; y lo que una parte deduce, la otra lo acumule. Esta es la auténtica simetría de pagos regida, adecuadamente, por los mecanismos de la ley.

En México, una cosa es la práctica y otra cosa es la teoría. La simetría fiscal del sistema tributario mexicano suena muy bonito en el papel. Allí está, y hasta podemos creer en las bondades de los sistemas tributarios y jurídicos del país, porque los sistemas son buenos. El problema está en quienes implementan dichos sistemas y que, para la operación del sistema, primero se toman en cuenta las percepciones de los políticos y hasta el último se presta atención al bienestar social del país.

No existe ningún partido que acepte pagar el costo político que implicaría la implementación de una verdadera simetría fiscal. Aferrados al sistema de poder, todos los candidatos prometen -de buena o de mala fe-, reducir las contribuciones. Por eso triunfan algunos embaucadores que, por el bien de México, deberían perder en las urnas electorales.”

Sobre el combate a la pobreza, el Fiscalista del Año comentó: “Con inversión y con trabajo, se puede combatir la pobreza. La inversión prioritaria es la que demanda la educación del mexicano que gasta más de lo que tiene. La educación necesaria para el desarrollo, incluye orden y disciplina en la administración del ingreso real. Esto se traduce en capacidad de ahorro y de inversión productiva. Si queremos combatir la pobreza, las escuelas deben enseñar a los educandos a trabajar, gastar y ahorrar para invertir. El problema es que la escuela sólo informa; pero no forma, no es formativa, no proporciona disciplina ni herramientas para que los alumnos lleguen a ser exitosos empresarios, trabajadores técnicos o profesionistas.

A nivel superior existen universidades y escuelas totalmente formativas de vocaciones empresariales y profesionales que, al desarrollarse, coadyuvarán automáticamente a combatir la pobreza. Por supuesto, estas instituciones también proporcionan abundante información y enseñan a obtenerla; pero sólo admiten bachilleres que cumplen con buenas calificaciones y otros requerimientos. Algunas como el Tecnológico de Monterrey, son altamente selectivas y costosas. Entonces, falta combatir los bajos niveles de educación formativa desde la enseñanza básica. Urge invertir en buenas escuelas donde existe mayor pobreza; en la capacitación de los adultos y en la generación de oportunidades en los lugares donde se necesita producir fuentes de empleo.

El combate a la pobreza va de la mano con el combate a la emigración de los indocumentados, la degradación o pérdida de nuestros recursos naturales, la contaminación ambiental, la violencia y el crimen organizado. En realidad, combatir la pobreza es cuestión de vida o muerte para todo el mundo y para todo el país; por tanto, requiere la suma de todos los involucrados y, en consecuencia, de las contribuciones bien administradas y bien invertidas por parte de los gobiernos nacionales y extranjeros; de la iniciativa pública y de la iniciativa privada.

Para combatir la pobreza y demás problemas económicos, necesitamos permitir al inversionista extranjero que meta sus fajos para desarrollar y modernizar los sectores productivos del país. Debemos cubrir esta importante necesidad y salvar a nuestra gente de falacias absurdas: Mentira que perderemos la soberanía a causa de la inversión extranjera. La perderemos -y de hecho la hemos perdido en gran parte-, porque la baja capacidad nacional de inversión, ha colocado a México y a los países menos desarrollados, bajo el poder del colonialismo económico que corresponde a las potencias industrializadas.”

La constancia es el poder de hacer realidad los sueños, convierte lo intangible en tangible y en visible el esfuerzo de cada día… Francisco Marcos Campos Ambrosio.

Oaxaca, cuna de héroes, de hombres ilustres, de intelectuales de primera línea, abogados de excelencia, poetas, músicos, pintores, escritores y tantos otros, también es la cuna del Maestro Francisco Marcos Campos Ambrosio.

El 13 de Septiembre de 1813, José María Morelos y Pavón convoca el primer congreso independiente del trono español; y dio lectura al texto que denominó Sentimientos de la Nación, en el que destaca la importancia de los Derechos Humanos y de la Libertad, esta carta se conoce como el primer antecedente de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

El 13 de septiembre de 1847, Cadetes del Colegio Militar se enfrentan a soldados estadounidenses en la Batalla de Chapultepec, acto heroico que se conmemorará por siempre. De manera coincidente y en un día tan importante de la historia de México, nace en 1971 Francisco Marcos Campos Ambrosio, hombre cuya convicción del éxito y voluntad es inquebrantable, con un logro más en su vida profesional al ser nombrado el Fiscalista del año.

Sus padres Francisco Campos (QEDP) y Esther Ambrosio, mexicanos responsables y trabajadores que hicieron honor a la institución familiar, brindaron ejemplo, educación, amor y todo cuanto fue necesario para entregar al país gente de bien, apasionada por su país y por su profesión.

En 1990 el joven Marcos, de figura espigada y con toda la ilusión se inscribe en la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca, en la Facultad de Contaduría y Administración, para realizar el curso de Contador Público, cinco años después se gradúa con el promedio más alto de su generación e inicia el ejercicio de su profesión.

A mediados de los 90’s, cuando la era tecnológica de la computación estaba ya en auge, se enrola como analista en sistemas a las filas de la primera empresa oaxaqueña en desarrollar software de contabilidad, en la cual destacó inmediatamente por sus habilidades en el uso de tecnología y de sus conocimientos en el área contable y administrativa.

Es aquí, donde conoce a su mejor amigo, es aquí donde se templa bajo fuego una alianza a prueba de todo, la amistad y afinidad empresarial que forjaron a partir de entonces Marcos Campos y José Antonio Pérez Ramos, fue el inicio del camino que hoy alcanza la cima.

Para 1998, siendo socio fundador, crea la empresa AFISCCO, "Actualización Fiscal Contable y Computacional", en la que además de generar estrategias fiscales y proporcionar asesoría empresarial, se programaban sistemas contables, las primeras calculadoras de impuestos, y se creó el portal de internet FISNET, "Información Fiscal para la Era Digital", en la cual se contaba con una revista especializada en temas fiscales y legales, un foro fiscal, información contable, sistemas de cómputo, cursos presenciales y a distancia utilizando las herramientas de esa época; y que marcó un hito como una de las primeras páginas de internet dedicadas a temas fiscales.

A inicios, del presente milenio y con mayor infraestructura se crea la Firma MRCI, Manejo de Recursos y Controles Inteligentes, se originó como un proyecto más ambicioso mediante el cual se establecieron alianzas estratégicas para generar presencia de la Firma en diversos Estados de la República Mexicana, y que actualmente cuenta con presencia en el extranjero.

Para el periodo 2007 - 2009, y combinando el trabajo cotidiano con los estudios, que Francisco Marcos Campos Ambrosio, alcanza el grado de Maestro en Impuestos, por el Instituto Fiscal Empresarial, y consiente de su responsabilidad profesional como asesor de empresas se gradúa en el año 2015 como Licenciado en Derecho.

En la actualidad y desde sus inicios en la empresa MRCI, se ha desempeñado como Director General del área de Comercialización, área estratégica de la empresa que dirige con férrea pasión y que tiene influencia en todas las demás áreas de la Firma, toda vez que, que es miembro permanente del Consejo de Administración.

Cuestionado, sobre el tema del éxito alcanzado, el Maestro Campos, nos comenta:

“Primero quiero manifestar mi profundo agradecimiento al Dr. Daniel Guzmán, a la Revista Defensa Fiscal, por el honor que me hacen con ésta distinción, agradecer a mi esposa, a mis hijos y familia, por su paciencia, a nuestra empresa y casa MRCI por el apoyo siempre total e incondicional; tal nombramiento me compromete como profesional a seguir trabajando, a continuar estudiando con la pasión y entrega total que nos exigen nuestros clientes, la gente que confía en nosotros, en aras de crear un México con mejores condiciones.”

“El camino no ha sido fácil, en unos inicios no teníamos más que un despacho, el cual rentábamos, adquirimos equipos de cómputo a través de crédito, teníamos una plantilla de 10 trabajadores, y sostener los gastos era muy complicado en ese entonces, había deudas y su servidor no tenía un sueldo, muchas veces nos tocaba poner de nuestra bolsa, pero era un sacrificio que estábamos dispuestos a hacer, nuestra visión estaba puesta en el futuro y en algún momento el esfuerzo y el trabajo darían sus frutos por simple consecuencia, nuestros propósitos eran firmes”.

“Ahora bien, el éxito como tal; es consecuencia de tener claros los objetivos, de perseguir fervientemente tus sueños y visiones, hasta convertirlos en una realidad. Ya lo decía en su tiempo Séneca: "Cuando un hombre no sabe hacia dónde navega, ningún viento le es favorable", por ello uno de los fundamentos principales de éste logro, es sin duda contar con la certeza de lo que se desea conseguir.”

“Y, cuando se disfruta de lo que se hace, el trabajo se facilita, creando un entorno de posibilidades infinitas. Consecuentemente se dan las oportunidades de trabajo con las personas que depositan su confianza en ti, creyendo firmemente que están en las mejores manos. Y son esas personas las que recomiendan tu trabajo.”

“Mirando el espejo de quienes me anteceden como Fiscalistas del Año, estoy comprometido a continuar con otros estudios, el Doctorado de manera inmediata y a mediano plazo la carrera de Economía, ya que el perfil del asesor empresarial exige conocimiento de diversas materias, es parte de nuestra misión y visión como valores empresariales en MRCI, siempre lo he dicho en cada curso y charla en las que tengo oportunidad de participar, la asesoría empresarial y patrimonial requiere de un equipo multidisciplinario”.

“Las exigencias del área Comercial a mi cargo en MRCI, requieren de atención constante, de tal manera que me allego de profesionales altamente calificados a fin de trabajar siempre en equipo, ésta es la columna principal de la que se sostiene nuestra Firma, contar en nuestras filas con gente muy inteligente (Principio Juarista), preparada y especializada; pero que además comparte los ideales y objetivos comunes de aquellos que vamos al frente. Lo anterior es necesario para generar soluciones viables que se puedan implementar con clientes, teniendo siempre como finalidad su seguridad jurídica y la observancia estricta de la Ley.

“En este momento, la empresa está finalizando su proceso de certificación en cumplimiento a la norma oficial ISO 9001-2008, y tu servidor está 100% a cargo de tal misión, entre otras actividades la revisión e implementación de un Sistema Maestro, que es un software creado en casa, para el control y automatización de todos y cada uno de nuestros procesos, lo cual facilitará nuestras actividades, permitiendo que seamos más productivos y en consecuencia más competitivos.”

“No todo es trabajo y estudio, el desarrollo humano debe ser integral, tu servidor practica la fé en Dios, practico de manera cotidiana el fútbol del cual soy un apasionado, seguidor de los Pumas de la UNAM, tomamos cursos constantemente de temas diversos al área fiscal, como puede ser, programación neurolingüística, ventas, desarrollo de habilidades para hablar en público, valores humanos”.

A partir de la decisión de conformar un grupo sólido de trabajo en materia de asesoría empresarial. Pero que además abarcara otras áreas, creando un sistema de negocios que hemos denominado Centro Concentrado de Negocios y Centro Concentrado de Servicios, aplicando mejoras al concepto “Holding”, ya que una estructura empresarial sólida requiere cobertura en todas las materias que tengan injerencia en la conformación de un negocio.

Es decir; la estructura empresarial pasa por la determinación de los socios, así como designación de los órganos administrativos de la sociedad, la designación de responsabilidades y vigilancia, contar con un oficial de cumplimiento en materia de obligaciones tanto internas como con terceros externos, la observancia de mejores prácticas empresariales, tal y como recomienda el Consejo Coordinador Empresarial en el Código Correspondiente.

La figura el órgano de Gobierno Corporativo, hoy en día es fundamental, es necesario para que las empresas determinen objetivamente sus obligaciones y las cumplan de manera cabal. Permitiendo que éstas perduren en el tiempo hasta institucionalizarse, lo cual genera aceptación y confianza para con terceros (autoridades, inversionistas, socios, trabajadores), incluyendo clientes.

En MRCI, tenemos implementado el Gobierno Corporativo y sus respectivos órganos de administración, así como oficial de cumplimiento, para implementar criterios y políticas internas que observen las mejores prácticas empresariales y desde luego cada requisito exigido por las leyes.

Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), la palabra Gobierno Corporativo se refiere a la forma en la que los negocios son dirigidos y controlados.

El Gobierno Corporativo abarca la relación de poder que existen entre los accionistas, los integrantes del consejo de administración y los principales funcionarios del consejo de administración.

La OCDE afirma que un buen Gobierno Corporativo hace referencia a los estándares mínimos adoptados por una sociedad para: administrar honestamente, proteger los derechos de los accionistas, definir la responsabilidad del consejo, definir la responsabilidad de la administración, dar fluidez a la información y regular las relaciones con los grupos de interés.

Recomiendo ampliamente, verificar en el portal de internet del Consejo Coordinador Empresarial, el Código de Mejores Prácticas Corporativas, de acuerdo con ello, adoptar y aplicar estas recomendaciones a fin de crear empresas sólidas y responsables.

Recordemos que está de moda el tema de la simulación de operaciones o de actos simulados, con lo que la autoridad busca que los contribuyentes no vendan o adquieran comprobantes fiscales con fines de erosionar la base fiscal, es decir; defraudar al fisco federal.

De ahí que en fecha reciente la Suprema Corte de Justicia de la Nación, haya determinado la constitucionalidad del artículo 69-B del Código Fiscal de la Federación, por considerar que no vulnera ningún derecho humano y fundamental tutelado por la Constitución. Por lo tanto, la autoridad podrá presumir la inexistencia de las operaciones que considera simuló el contribuyente a fin de determinar las sanciones correspondientes, administrativas y más grave las sanciones penales conforme a la fracción III del artículo 113 del CFF.

Por lo tanto, es primordial, que las empresas que presten y adquieran servicios, efectivamente cuenten con la suficiente capacidad material, intelectual, de infraestructura, para la efectiva prestación de servicios, con ello demostrar con elementos de convicción suficientes la realización de los servicios prestados. Ya que no es suficiente un contrato, se tienen que aportar otros medios probatorios.

Lo anterior no obstante que, a mi consideración particular, el artículo 69-B comentado es a todas luces inconstitucional e inconvencional, sin embargo; nos corresponde agotar otras instancias, en este caso las internacionales, llevando este asunto a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, pues evidentemente el dispositivo legal en comento es violatorio de derechos humanos.

Una de las cosas que nos distingue es nuestra capacidad de crear, de innovar, de anticipar, en cierta forma de predecir (sin ser adivino, solo basta observar con atención lo que alrededor sucede), para posteriormente adaptarse a las circunstancias de un mundo dinámico. Mas en esta materia en la que se dan cambios constantemente.

Desde luego, no todo ha sido fácil, en el terreno donde establecemos el juego, no hay que olvidar que del otro lado está la autoridad fiscal, que en conjunto con los Órganos Legislativo y Judicial, han tratado de limitar las opciones de los contribuyentes, sin embargo; nuestra labor siempre será la de hacer cumplir la ley, empleando mecanismos de control de los actos de autoridad que resulten arbitrarios, no solo en beneficio de los contribuyentes, ya que también el estado deberá reaccionar y desde cada una de sus competencias tendrá que facilitar los procedimientos de tributación y recaudación de impuestos para dar seguridad jurídica a los gobernados. Tal y como sucede en otros países. No es sano, que los contribuyentes no constaten fehacientemente el destino de los recursos que aportan al estado, el que se agrave la inseguridad y se siga manteniendo la carga tributaria en quienes menos tienen, quebranta el pacto federal, en perjuicio de nuestro México.

La constancia ha sido clave para mantener a nuestra empresa en primeros planos, muchos años de experiencia nos avalan y desde luego nuestros clientes. Adicionalmente ésta Firma ha contado con talento suficiente, la administración general del corporativo ha sido indispensable, así como gerentes y cada uno de nuestros colaboradores, aporta para que esta maquinaria funcione con perfección.

La fórmula que hemos utilizado desde un inicio ha ido evolucionando, lo que permite marcar diferencias, debemos adaptarnos a las circunstancias, considero que la manera en que nos hemos acoplado, además de generar sinergia incorporando nuevo talento a los elementos de mayor experiencia, nos han forjado como una Firma de vanguardia que difícilmente podrá diluirse. Para nosotros no existe un problema sin soluciones, es por eso que dedicamos tiempo de estudio e investigación para estar siempre a la vanguardia, con estrategias legales preventivas y correctivas para nuestros usuarios.

Hemos construido una política de liderazgo fundamentado en valores, tanto humanos como sociales, bien dicen "El liderazgo es una oportunidad de servir; no de lucirse ", consideramos que las personas que integran la empresa son nuestra familia, convivimos con ellos día a día, es por ello que imprimimos humildad y respeto en todo lo que hacemos, con un sentido de compromiso, excelencia y responsabilidad.

La verdadera esencia del liderazgo radica en que aquél que guía, tiene que poseer una visión, desde que decidimos unir esfuerzos para comenzar a trabajar juntos, hemos formado relaciones más que de trabajo, de amigos, quien trabaja en MRCI sabe que tiene respaldo de los demás, incluso más allá del ámbito laboral.

Transmitimos este pensamiento de lealtad, igualdad, libertad y democracia en todos y cada uno de los niveles que nos conforman para que no sea solo una política interna, sino un modo de vida.

En nuestro grupo siempre fijamos objetivos a corto, mediano y largo plazo, en el futuro inmediato, estamos trabajando en la internacionalización de la Firma, estableciendo alianzas que nos permitan tener presencia en otros países, tal y como ahora tenemos en Estados Unidos y algunas partes de Centroamérica, nuestra meta está dirigida hacia Europa, pues en esos países particularmente en España, cuentan con modelos legales de tributación que se están incorporando a México.

Vemos al corporativo, consolidado, incluso en aquellos ámbitos en los que apenas comenzamos a emprender, sin embargo; cada año lo iniciamos con la consigna de que sea mejor que el que nos antecede. Nos visualizamos como una empresa vanguardista, que sea modelo de otras.

Sí, como se ha mencionado anteriormente, una de nuestras características es el estar en constante movimiento, buscando oportunidades de negocios y espacios en donde sabemos que podemos ser útiles. Otro de los proyectos está fijado en fundar una universidad, incursionar en algunos deportes como puede ser el futbol. Buscamos oportunidades en las cuales podamos apoyar en la formación de nuevas empresas y la creación de fuentes de empleo.

“La mejor manera de predecir el futuro es creándolo, tienen que fijarse objetivos, y una vez conseguido, trazarse nuevas metas, la constancia y el trabajo revelan siempre nuevas oportunidades, el fin de un camino es el inicio de otro, y finalmente deben estar convencidos de lo que hacen, si aman lo que hacen, nunca tendrán que trabajar, México, así como los empresarios mexicanos y extranjeros que invierten en nuestro país, necesitan profesionales comprometidos y preparados.”

En MRCI hacemos la historia, no la contamos…

DESDE LA MONTAÑA SAGRADA, se avistan a lo lejos las planicies de las Ocho Regiones de Oaxaca; La Cañada, donde Huautla de Jiménez se levanta como un bastión del Teonanácatl, el hongo místico que María Sabina regalara con unción a todo aquel que se acercara al Cuauhtlán, el bosque de las águilas; la Costa, donde reina Nuestra Señora de Juquila en Santa Catarina, milagrosa y radiante, coronada pontificalmente con sus treinta centímetros de grandeza, dorada al fuego y soberana de uno de los santuarios con mayor devoción en México y donde las aguas del pacífico bañan las facundas costas de Puerto Escondido, Puerto Ángel, Huatulco y Pochutla, las rústicas y autóctonas playas que Sir Francis Draque calificara de “empíreas”; el Istmo, por donde las tehuanas pasean, con sus coloridos ajuares de huipil y enagua bordados de suculentas flores, la tradición fascinante en las calles de Juchitán y Tehuantepec; la Mixteca, pletórica de artesanías, bailes y música, de arraigadas costumbres y donde la semilla de la brillante cultura Ñuu Dzahui, dio fruto levantando a su paso un pueblo que venera sus tradiciones con inusitado fervor; la Cuenca del Papaloapan, tierra exuberante y extraordinaria, casa del tucán y del jaguar, y donde la danza de Flor de Piña, rescata el néctar de la cosmología oaxaqueña; la Sierra Sur, plegada de montañas cetrinas rebosantes de encinos y oyameles que dan tinte a los sembradíos de café y azúcar, donde se vibra al compás de las chilenas y en la que el ancestral venado tiene su refugio; la Sierra Norte, adonde los indígenas zapotecos resguardan celosos la espesura de la selva y la arboleda trayendo consigo rituales antiquísimos que han conservado intacta y rebosante de vida la inmaculada naturaleza; y los Valles Centrales, cuna del Daniban, el centro ceremonial que albergara a los zapotecos; lugar donde se levantó en cantera verde la Muy Noble y Leal Ciudad de Antequera; recinto del mezcal y del barro negro, del Templo de Santo Domingo de Guzmán y de la Iglesia de la Soledad; sede de la Guelaguetza, las Calendas y la Noche de Rábanos; Patrimonio de la Humanidad; Ciudad que formó a Benito Juárez y que vio nacer a Porfirio Díaz, dos prohombres que dieron historia al México bifurcado en dos siglos.

De esta gloriosa tierra de portento y diversidad, con sus 16 lenguas indígenas, sus 570 Municipios y sus 8 Regiones, se desprende un legado fascinante que no tiene comparación en nuestra Nación Mexicana. Porque el encantamiento del lugar, responde a una insólita aglomeración de culturas que se han mezclado sin perder su originalidad llevando a Oaxaca al culmen de las costumbres y tradiciones ancestrales. Y de este patrimonio colosal del que emana magnificencia, el Dr. Pedro Lozano Jiménez es justo heredero, un hombre que representa en carne propia la generosidad y la nobleza de un pueblo colmado de grandeza, de esplendor. Por su sangre galopa la estirpe de una civilización milenaria, que hincó sus raíces en la sabiduría y el misterio. Un deífico sucesor de Pitao Peze, Señor de la riqueza, Espíritu de la fortuna, Abogado del viento, Dios del cielo. Que forma parte de un linaje de recio abolengo de guerreros que dominaron un extenso territorio inmortalizando un antiguo mundo.

Con su porte real de pensador omniscio, Pedro Lozano Jiménez se conduce por las venas abiertas de la viviente Huaxyácac; de la Biblioteca Central Margarita Maza de Juárez a la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca camina con paso certero, mirando el horizonte por el que cae un sol atracando toda sombra. La insignia de MRCI figura en la solapa de su saco rutilando como una estrella en cada destello del speedlight Canon; conversa en voz alta detallando cada rincón cual si se tratara de un cronista de cepa narrando la ciudad y su metamorfosis. La caminata es extensa hacia el Templo de la Soledad, pero su vitalidad es pródiga, se detiene en una tienda de artesanías y nos describe con desenvoltura el proceso creativo del barro negro acariciando un ejemplar. Se nota la calidez de su trato, la simpatía hogareña de quién es amo de una villa y a sabiendas la deambula, el roce familiar con un sitio y sus moradores. De norte a sur y de este a oeste, ha circulado los pasajes y alamedas ganándose la vida, trabajando con ahínco en una urbe que atesora el carácter y la avenencia de los hombres; saluda al heladero, al pintor y al maestro con desenfado y amabilidad; la comarca llamada Oaxaca, tiene por terrateniente a un solariego jubiloso, que ama y honra esa tierra.

El Dr. Pedro Lozano Jiménez, ha señoreado las riendas de una Firma prominente con el don de la inteligencia y la tenacidad. Su pensamiento profundo de la defensa fiscal, abreva en las aguas cristalinas de la inexorable razón, con una intransigente y feroz defensa del Estado de Derecho, amparada en los principios rectores de justicia y libertad. Un patriota que afianza su sabiduría en pos de los más desprotegidos, dotándolos de un arma con la que las tropelías e inmoralidades, serán exterminadas. Un prodigio que avizora con ojos proféticos, la errática marcha del Derecho Tributario, anclada por momentos en una indescifrable encrucijada. Su esfuerzo adamantino que se pule en su misión de cada día, lo corona como un experto zagal ahíto de vigor y de entereza, que lo sitúan ya, como uno de los estrategas fiscales más destacados del escenario tributario. El Consejo Editorial de la Revista Defensa Fiscal, se place en otorgar el célebre nombramiento de Fiscalista del Año al Dr. Pedro Lozano Jiménez, como un merecido homenaje a su admirable trayectoria profesional y a su extraordinaria labor en defensa de los contribuyentes y del desarrollo social y económico de México. ¡Enhorabuena!

Llegando diligentes a la Calle Violetas en la Colonia Reforma, nos deslumbró el colosal monumento que es el edificio central de MRCI. En el lobby nos esperaba entusiasmado nuestro Fiscalista del Año, micrófono y cámara en mano nos condujo a su oficina, en el trayecto advertimos a un cuantioso grupo de colaboradores que le saludaban cálidamente a su arribo. Así comenzó la entrevista.

Nací un dos de noviembre de 1978 en Oaxaca de Juárez, siendo el menor de cinco hijos. Mis padres son originarios del municipio de Villa Sola de Vega, una serranía cercana al Río Atoyac. Mi niñez transcurrió con varias dificultades, pues al morir mi padre cuando solo tenía dos años, tuvimos mi madre y mis hermanos, que hacernos a la vida dura del trabajo, pero con un inquebrantable espíritu de lucha. Comencé a laborar a los diez años de edad, vendiendo paletas de hielo en una tartana por las calles del centro, limpiando parabrisas en algunas avenidas y vendiendo periódicos en diversos cruceros de la ciudad, pensando siempre en el ideal supremo de la cooperación doméstica. Y así me incorporé al poco tiempo a los talleres del DIF aprendiendo el oficio de zapatero, donde mi impresión de ingenio y astucia como orador, me hicieron merecedor de una cordial felicitación por parte del entonces Presidente de la República Mexicana.

Estudié en la “Escuela Secundaria para Trabajadores” con un horario prácticamente nocturno que me permitía realizar algunos trabajos para seguir solventando mis estudios. Y de igual manera, cursé el Bachillerato en el sistema abierto, alternando así mis compromisos laborales. En 1999 me inscribí en la Carrera de Derecho de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca con la ilusión de convertirme en abogado y defender las causas justas de la gente. Por ello, comencé a trabajar en un despacho por las mañanas para acudir por las tardes a la Universidad. Y fue durante mi primer año que conocí al Maestro José Antonio Pérez Ramos, como compañero de aula en la Facultad, donde hicimos muy buena amistad buscando siempre la retroalimentación dogmática y anhelando en un futuro trabajar juntos.

El 10 de enero de 2005 me incorporé a MRCI, realizando labores de apoyo, paralelo a esto busqué la posibilidad de avanzar académicamente ingresando a la Maestría por la Universidad Regional del Sureste concluyéndola en 2011. Durante estos periodos siempre tuve la inquietud de seguir adquiriendo conocimientos acudiendo a cursos y conferencias que fueron moldeándome profesionalmente. Un evento que recuerdo de manera muy particular fue en octubre de 2005, cuando tuve la oportunidad de acudir por primera vez a un congreso de la revista DEFENSA FISCAL en la Ciudad de México, en donde grandes expositores, entre ellos el Dr. Adolfo Solís Farías, disertaban magistralmente sobre tópicos fiscales, cuestión que influyó en mi convicción de querer dedicarme de lleno a la materia fiscal, específicamente al litigio. Inmediatamente inicié el Doctorado en Ciencias de lo Fiscal por parte del Instituto de Especialización para Ejecutivos. Durante todo este tiempo seguí desarrollando mis actividades al interior de la Firma MRCI y me tocó ver muy de cerca su crecimiento con un mayor número de asuntos y con imperiosa necesidad de contratar a un mayor número de colaboradores, siempre de la mano de grandes Maestros como el Dr. José Antonio Pérez Ramos, y el Maestro Manuel Morita Cansino, quienes han sido pilares y forjadores que delinean los principios que rigen a la Firma.

Es entonces que en octubre del 2010 se me encomendó la Gerencia Jurídica que es el puesto que actualmente desempeño y que hasta el día de hoy he podido ejercer con mucha satisfacción y liderazgo. Actualmente cuento con un equipo de colaboradores de treinta y cuatro personas con cuatro diferentes subáreas que integran el departamento. Me siento realmente agradecido porque es un equipo muy joven, talentoso, y comprometido que está en verdad haciendo historia. Es muy satisfactorio que MRCI me dé la oportunidad de crecer y desenvolverme profesional y académicamente.

Significa una gran Institución, un equipo, una familia a la que le dedico gran parte de mi tiempo, desarrollando mis capacidades y habilidades que resaltan lo mejor de mí, no solo en el ámbito profesional sino también en el ámbito personal en razón de que se fomenta el esfuerzo, la dedicación, el respeto, la perseverancia; valores fundamentales que sin duda se traducen en la generación no solo de grandes profesionistas sino de mejores personas, llenas de virtud, de patriotismo, porque esta empresa es creadora de ciudadanos responsables con un sentido de compromiso social que es nuestra mayor encomienda y nuestro mayor orgullo. Como Gerente Jurídico mi mayor responsabilidad es dar los resultados esperados, que se logran con la conformación de un equipo multidisciplinario, solidario y talentoso. Y desde luego, atendiendo a la confianza que me ha sido entregada.

Yo diría que es de sobrada importancia nuestra labor, porque los engranajes de las leyes fiscales constantemente se encuentran a oscuras, y hay que alumbrarlos para que el motor del progreso no se detenga. En este sentido debemos ser un grupo multifacético y con amplia responsabilidad social, consciente de las necesidades de un país como el nuestro, con carencias de diversas índoles y que exige del conocimiento y la ayuda de una comunidad de expertos en materia fiscal, un profesionalismo y un estudio constante que puedan dimensionar la necesidad de un respeto al Estado de Derecho. Las autoridades fiscales en su labor de recaudación muchas veces lo hacen a costa de los derechos fundamentales de los contribuyentes, y desde luego nosotros como artífices de la defensa fiscal, tenemos la obligación de levantar la voz atrayendo la probidad y la honradez, coadyuvando en el desarrollo de cada empresa, mejorando así la economía y el bienestar de toda la sociedad. Y que mejor que mediante los foros que existen para tal efecto como las publicaciones, los congresos, las universidades, la radio y la televisión, las redes sociales, y cualquier plataforma que esté a nuestro alcance y donde podamos exponer nuestros puntos de vista y evidenciar los instrumentos que tienen estos contribuyentes para hacer valer sus derechos, o en su caso, para ponerle un alto a las arbitrariedades por parte de las autoridades fiscales.

Creo que la mejor estrategia fiscal es aquella que se realiza desde la óptica de un diagnóstico individualizado, atendiendo a las características de cada contribuyente y de cada caso particular, como los antiguos alquimistas zapotecos, precursores de la medicina moderna, que, ante una peculiar enfermedad padecida por un específico individuo, vertían los ingredientes en la pócima con excelentes resultados, y no de manera general. Sin embargo, se suele pensar que frente a algunos tópicos se pueden implementar las tácticas y planeaciones de manera generalizada, lo cual es francamente erróneo, en virtud de que, en cada caso, se tiene que realizar un análisis minucioso para que se pueda verificar su actualización al caso concreto al que se pretende aplicar, partiendo del hecho que, ningún asunto será exactamente igual a otro por las particularidades que cada contribuyente presenta. Finalmente, el marco normativo que rige la materia fiscal es tan cambiante que de un momento a otro ya no resulta aplicable una determinada estrategia, sino que se tiene que actualizar al caso en particular analizándolo a fondo.

Indiscutiblemente no, considero que se está errando nuevamente el camino, pues no debemos de olvidar que las medidas que se están tomando, son medidas extraordinarias que el Gobierno Federal ha tenido que adoptar a causa de situaciones que privan la economía internacional y la situación que se vive en Estados Unidos, siendo meras vendas adhesivas que se están poniendo en una herida que requiere sutura, tan es así que a pesar de la poca popularidad que el actual Presidente tiene en la ciudadanía, está teniendo que ir en contra de sus compromisos de campaña, como lo es aumentar las tarifas eléctricas, así como el precio en los combustibles, e incluso en el caso de los impuestos tampoco ha cumplido, pues si bien es cierto no se ha observado una reforma de esa naturaleza, si podemos ver como a través de Resolución Miscelánea, de criterios no vinculativos, o de reformas al Código Fiscal se están haciendo los ajusten necesarios para lograr una mayor recaudación, pero a través de procedimientos más agresivos de fiscalización.

Lo bueno de la reforma puedo destacarlo en tres puntos, el primero es lo relativo al Outsourcing, que su regulación en la LISR permitirá que se pueda distinguir entre empresas que realmente brindan el servicio y empresas fantasmas que únicamente facturan el servicio, lo anterior permitirá que únicamente el Outsourcing bueno quede en el mercado. El segundo punto es la consolidación de los medios electrónicos, pues la reforma no presenta mayores cambios, que lo correspondiente al vicio de inconstitucionalidad decretada por la Corte, lo que acredita que su implementación se ha consolidado en nuestro sistema, y que si bien muchos pudieran no estar convencidos, familiarizados o no gustarles, lo cierto es que es una herramienta que llegó para quedarse, y que constituye un mecanismo eficaz de fiscalización, así como de cumplimiento de las obligaciones, y que pone a México a la vanguardia. Y finalmente y no menos importante para considerarse dentro de lo bueno, es la propuesta para implementar el juicio exclusivo de resolución de fondo, lo cual es acorde con las acciones tomadas a lo largo del mandato del Magistrado Presidente del Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa, en cuanto a lograr una mayor prontitud y expeditez en la impartición de justicia en dicho Tribunal.

Lo malo de la Reforma Fiscal es que sigue sin haber una verdadera reforma estructural que permita al país tener una mayor y mejor recaudación, y por el contrario únicamente se viene poniendo una serie de parches que exclusivamente ponderan el cobro a como dé lugar, pasando por alto que es igualmente importante una buena administración y destino del gasto, pues nuestros actuales gobernantes muestran una clara cultura del despilfarro y del dispendio. La sociedad actual reclama políticos y funcionarios honestos y conscientes de la situación económica actual y responsables con esa realidad, cuestión que hasta el momento no ha acontecido pues tenemos representantes de dudosa calidad que se oponen abiertamente o cuando menos obstaculizan el cumplimiento de las leyes de transparencia, y legisladores que ven gratificada su labor mediante bonos estratosféricos que lastiman la realidad social, y un Poder Judicial cómplice y permisivo de los abusos de los demás poderes.

Finalmente, lo feo de la Reforma Fiscal es el hecho de que una vez más, y como ya es una tradición en nuestro país, es que son los contribuyentes de siempre, los cautivos, los que llevaran en sus hombros a este país, esa clase media que quincena a quincena ve mermarse su salario con los impuestos pagados. La reforma por ejemplo propone estímulos a vehículos eléctricos cuando, es bien sabido que a los mismos únicamente pueden acceder las personas de mayores ingresos, así mismo, esos mismos contribuyentes se enfrentarán a un sistema fiscal sumamente complejo y cada vez con mayores obligaciones que simplifican las cosas, pero únicamente para la autoridad fiscal.

Sí, necesariamente, existe un gran desconocimiento en materia tributaria, tanto en obligaciones como en los derechos que se tienen, pues por una parte se conserva la percepción generalizada de que no existe un beneficio palpable por el pago de sus contribuciones, la cual en el mejor de los casos los impuestos servirán para financiar los lujos de nuestros políticos y funcionarios públicos, sus bonos de fin de año, sus prestaciones extralaborales como seguridad personal, la de sus familias, sus gastos médicos en instituciones privadas, etc., que se traduce en una pérdida de interés o compromiso en el pago de las contribuciones, en tanto que por la otra, el problema es el propio ciudadano que desconoce sus derechos fundamentales e instrumentos jurídicos para hacerlos valer, aunado a la pérdida de confianza en los medios de defensa con que se cuentan, como lo son los recursos administrativos, el Juicio Contencioso Administrativo e incluso el propio Juicio de Amparo que tradicionalmente ha sido el medio de defensa por excelencia en el que el ciudadano confiaba, lo cual actualmente no es así, pues el ciudadano los ve como una carga, en el menor de los caso como un riesgo que habrá que correr por los años que dure el juicio, y ello deriva precisamente del hecho de que la resoluciones que a últimas fechas han emitido los tribunales no representan a la sociedad, sino al gobierno.

He presenciado con enorme tristeza casos en los cuales, contribuyentes han tenido que pagar créditos fiscales evidentemente ilegales procedentes de la intimidación que han ejercido las autoridades fiscales, renunciando a medios de defensa con que cuentan a su alcance para defenderse. Lo anterior refleja ignorancia total de los mismos y su finalidad, y más grave aún, la pérdida de confianza de los gobernados en nuestras instituciones encargadas de impartir justicia, eso sin duda, hace apremiante el realizar una labor ardua de concientización en la ciudadanía y desde luego, recuperar un sano equilibrio en nuestros tribunales que permita verdaderas sentencias autónomas y no simples lineamientos dictados desde el ejecutivo en pro de salvar nuestra precaria economía.

De manera inmediata se reflejará una disminución de la actividad económica, lo cual es normal por la incertidumbre que han generado sus declaraciones respecto de la relación comercial con México, sin embargo al mediano y largo plazo considero que será muy benéfico para nuestro país esta situación en virtud de que tendremos que buscar nuevos socios comerciales, y que afortunadamente hemos visto cierto coqueteo por parte de China, lo cual es un ejemplo de que México puede tener una gran oportunidad frente a sus ojos para dejar de depender de su vínculo con Estados Unidos.

Es importante precisar que aun para el caso que nuestra relación con nuestro vecino del norte se deteriore, ello de ninguna manera significa que el nexo comercial se va a romper de manera definitiva, sino únicamente disminuiría, lo cual se tendría que buscar compensar con la búsqueda de nuevos socios comerciales no solo de América Latina, sino a nivel mundial, de tal manera que a la larga el mayor beneficiado será México al lograr autonomía económica, inclusive véase que en ese sentido ha sido la postura de Carlos Slim, no se debe de perder la oportunidad de aprovechar este momento coyuntural en que vivimos en donde todo es tecnológico y globalizado, entonces debemos de prevaler que las condiciones están dadas, y atrevernos como país en este momento en que más se necesita.

Que la profesión de abogado no solo es bondadosa, sino apasionante, fascinante, que lleva además una larga historia y que es una ciencia emanada del pensamiento humano que la convierten en baluarte de la civilización. El Derecho Tributario por su parte es una materia de amplio espectro y tradición donde las reformas constitucionales juegan un papel preponderante, el cambiante mundo del comercio y la economía hacen de esta disciplina sumamente atrayente donde la defensa fiscal sirve de timonel por el que se guía el respeto a los derechos fundamentales.

Las nuevas generaciones son determinantes para definir el rumbo que tomará nuestro país, es importante que tomen conciencia que el futuro son ellos, que la Nación confía en las ideas frescas, por eso me he rodeado de un equipo joven, fuerte, organizado y comprometido con los objetivos generales y particulares de nuestra empresa, con amplio sentido de responsabilidad social y que compartan nuestra misión y visión, apelando precisamente a esa modernidad en las ideas que la gente joven puede aportarnos, tan es así que en MRCI se le abren las puertas a la juventud con ánimos de querer aprender, entregando así a la sociedad excelentes profesionistas y mejores seres humanos.

Jamás abandonen sus sueños y objetivos, ni olviden que por regla general las personas exitosas no son superdotados sino súper dedicados, por eso el asunto está en el esfuerzo y la entrega, el estudio riguroso y el hambre de éxito, por algo se dice que en la cultura japonesa se da gran importancia a la disciplina, tan es así que rigen su vida entre otras, en la frase “la disciplina tarde o temprano vencerá a la inteligencia”.

Finalmente, el sentar buenas raíces permite generar buenas ramas, dense la oportunidad de ser buenos estudiantes para poder ser buenos profesionistas y a su vez buenos mentores de las generaciones que en su momento les tocará formar.

Un enorme orgullo, una gran satisfacción y más aún, una gran responsabilidad que este nombramiento conlleva, es por ello que agradezco infinitamente a la Revista Defensa Fiscal, a su Director General, el Dr. Daniel Guzmán López, así como al Honorable Consejo Editorial que de manera contundente ha tenido a bien designarme como Fiscalista del Año 2017. Este reconocimiento no solo es a una persona, sino a toda la organización a la que pertenezco, a mi amigo, compañero y eterno maestro el Dr. José Antonio Pérez Ramos, a los fundadores de MRCI, pasado, presente y futuro que se conjugan para fortalecer esta gran organización. Es también un reconocimiento para mi equipo de trabajo que con su colaboración han hecho realidad los anhelos y las metas que con gran tesón nos hemos propuesto, y que sin duda reflejan la grandeza de este joven equipo de trabajo. Para mí los premios son importantes, pero más importante es la sensación del trabajo bien hecho y del deber cumplido, y es por ello que esta distinción representa un gran honor y una gran responsabilidad de seguir trabajando para enaltecer tan inmerecido reconocimiento.

En Casa Oaxaca, el Dr. Pedro Lozano Jiménez nos advierte su predilección por la gastronomía oaxaqueña; las tlayudas, los tamales, las memelas, los siete moles, el tasajo, el chorizo, los quesos, el guacamole, los chapulines, el chocolate, el mezcal, el chileatole, y un sin fin de delicias que van poniéndose a la mesa mientras nos conmina a degustar un buen mezcal Tobalá sin “irrespetar a los dioses con excesos”. Su postura se amolda al vientecillo oriundo de los carrizos del techo, la atmósfera es festiva y elocuente, su voz se conmueve cuando su plática se adentra en los ilustres personajes oaxaqueños; Andrés Henestrosa, José Vasconcelos, los hermanos Flores Magón, Porfirio Díaz, Rufino Tamayo, Francisco Toledo, Álvaro Carrillo, Macedonio Alcalá, Susana Harp, Lila Downs. Y donde Benito Juárez tiene un lugar preponderante en su pensamiento: “Significa grandeza, orgullo, ejemplo, culminación; es la representación de que todo es posible con disciplina y voluntad. El Benemérito de las Américas simboliza la materialización del éxito que puede lograr cualquiera a pesar de la pobreza y al mismo tiempo reafirma que la educación es el camino más corto para llegar a la gloria y al honor”. Hace un par de llamadas y vuelve a la charla, está leyendo dos libros, “Secreto Bancario y Defraudación Fiscal” de Ambrosio Michel Higuera e “Introducción al Psicoanálisis” de Sigmund Freud, señal de su personalidad multifacética. Gusta de casi todos los géneros musicales, de la clásica al pop, sin dejar de lado su amada música folklórica, la chilena, el son istmeño, el huapango y el son de artesa, sonidos de una tierra que es todo color y luminosidad. Porque sobre Oaxaca lo tiene todo claro: “Es mi hogar, el lugar donde quiero vivir y el lugar donde quiero morir, el sitio en donde puedo recorrer cada palmo de tierra y disfrutar el entorno con mis cinco sentidos, sentarme en uno de los laureles del Zócalo, degustar una nieve en la Iglesia de la Soledad, sentir el aire fresco de la Sierra Norte, escaparme para recorrer Monte Albán, nadar en las plácidas aguas de Mazunte. Pienso que realmente soy muy afortunado de tener lo que tengo y de vivir donde vivo, de poder compartir mi vida con las personas que quiero y aquí en mi amada Oaxaca.” Así fueron las últimas palabras de la tarde, llegaba la noche presurosa a acallar un poco el barullo de una ciudad que no descansa, que vive intensamente cada comisura de embaldosado suelo. El micrófono y la cámara se habían apagado dejando un eco de melancólico recuerdo, había que volver a ver las imágenes y escuchar de nueva cuenta la voz de nuestro ilustre entrevistado para sentirse más cerca de las nubes, de esa prosapia etérea que fundó la ciudad más bella de México. La impronta era necesaria y recurrente en nuestras mentes, nuestro Fiscalista del Año, el Dr. Pedro Lozano Jiménez, un hombre de honor que luce con decoro tan emblemático galardón, caminando entre vetustos templos y sagrados monumentos, en viento rápido y con la indumentaria al vuelo como un Señor vigilando su feudo en pos de la grandeza de un Pueblo y de una Nación.